La sal del lavavajillas es un componente esencial para obtener resultados óptimos en la limpieza de la vajilla y prolongar la vida útil del electrodoméstico.
A continuación, se detallan las principales funciones y recomendaciones sobre el uso de la sal en el lavavajillas:
Funciones de la sal del lavavajillas
- Ablandar el agua y contrarrestar los niveles de cal: La sal en el lavavajillas ayuda a suavizar el agua y evitar la formación de cal en la vajilla y en el propio electrodoméstico. Esto se debe a que la sal atrae y atrapa los iones de calcio y magnesio presentes en el agua, evitando que se adhieran a los utensilios y generen manchas blancas.
- Evitar la corrosión y prolongar la vida útil del lavavajillas: Al ablandar el agua, la sal también contribuye a prevenir la acumulación de cal en el interior del lavavajillas. Esto ayuda a evitar obstrucciones en mangueras, electroválvulas y otras piezas plásticas, así como fallos en el ingreso de agua al electrodoméstico. En consecuencia, el uso adecuado de la sal puede ayudar a prevenir averías y prolongar la vida útil del lavavajillas.
- Eliminar manchas blancas en la vajilla: La presencia de cal en el agua puede dejar manchas blancas en la vajilla después del lavado. La sal del lavavajillas contrarresta estos niveles de cal, asegurando que la vajilla salga limpia y sin manchas.
Recomendaciones para el uso de la sal del lavavajillas
- Utilizar sal especial para lavavajillas: Es importante utilizar sal específica para lavavajillas, ya que otras sales, como la sal de mesa, pueden contener aditivos como yodo y flúor que pueden dañar el electrodoméstico. La sal para lavavajillas tiene una granulometría más grande y una composición química sin aditivos.
- Añadir sal justo antes de cada lavado: Se recomienda añadir la sal en el lavavajillas justo antes de cada proceso de lavado. Esto asegura que el agua utilizada esté en las condiciones óptimas para eliminar la suciedad y la grasa de la vajilla.
- Consultar el manual del lavavajillas: Cada lavavajillas puede tener un diseño diferente, por lo que es importante consultar el manual del electrodoméstico para conocer la ubicación del depósito de sal y las instrucciones específicas de llenado.
- Ajustar la dureza del agua según la zona: La cantidad de sal a utilizar depende de la dureza del agua de la zona en la que se viva. Algunos lavavajillas tienen un ajuste de dureza del agua que permite adaptar el funcionamiento del electrodoméstico a las características del agua de cada lugar.
- Reponer la sal cuando sea necesario: Es importante reponer la sal en el lavavajillas cuando el depósito esté a punto de vaciarse. La mayoría de los modelos de lavavajillas actuales tienen un indicador luminoso que avisa cuando es necesario cambiar la sal.
- Evitar el uso de sal en zonas con baja concentración de cal: En zonas con baja concentración de cal en el agua, no es necesario utilizar sal en el lavavajillas. Esto no causará problemas en el funcionamiento del electrodoméstico.
- Cuidado al llenar el depósito de sal: Se recomienda llenar el depósito de sal con cuidado, evitando derrames y daños en el acero inoxidable del lavavajillas. Utilizar un embudo puede facilitar el proceso de llenado.
- Realizar un ciclo de prelavado: Antes de utilizar el lavavajillas por primera vez después de añadir sal, se recomienda realizar un ciclo de prelavado para eliminar los restos de sal y asegurarse de que el agua utilizada en el lavado esté en las condiciones óptimas.